El 26 de septiembre, Daniel Noboa afirmó que estaría lista en cinco semanas.
La nueva cárcel del Encuentro, ubicada entre Juntas del Pacífico y la Bajada de Chanduy, en Santa Elena, empieza a recibir a los primeros reclusos bajo estrictas medidas de seguridad. Este centro de máxima seguridad —construido en un área agrícola de más de 30 hectáreas y una inversión de USD 50 millones— incluye cinco pabellones, cuatro patios, tres anillos de seguridad, seis torres de vigilancia de 9,5 metros y sistemas de monitoreo con inteligencia artificial.
El Gobierno confirmó que se están ejecutando traslados desde distintas prisiones, y que este proceso motivó la reorganización interna del sistema penitenciario. El SNAI señaló que los incidentes registrados el domingo 9 de noviembre en la cárcel de Machala estuvieron ligados justamente a estos movimientos de reclusos. En ese centro se hallaron 27 internos muertos, aparentemente por asfixia.
La mañana del lunes 10 de noviembre, un bus salió desde Machala transportando reclusos hacia la nueva cárcel, considerada zona de seguridad con acceso restringido. Según el ministro del Interior, John Reimberg, allí serán ubicados detenidos catalogados como objetivos de alto valor.
El presidente Daniel Noboa había anticipado el 26 de septiembre que el centro estaría operativo en cinco semanas, plazo que ahora se cumple.
