La prisión de Alcatraz, frente a San Francisco, operó entre 1934 y 1963. ¿A quién planea Trump enviar ahora?
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la reapertura y ampliación de la prisión de Alcatraz, ubicada en una isla frente a San Francisco, California. La cárcel, que funcionó entre 1934 y 1963, fue clausurada por sus altos costos de mantenimiento y posteriormente se convirtió en una atracción turística.
Trump ordenó a la Oficina Federal de Prisiones, en colaboración con el Departamento de Justicia, Seguridad Interna y el FBI, trabajar en la reactivación del centro penitenciario con el objetivo de albergar a los criminales «más violentos» del país. En su comunicado, también sugirió que inmigrantes indocumentados podrían ser encarcelados en Alcatraz, criticando a jueces que impiden la deportación de delincuentes.
La prisión de Alcatraz, conocida como «The Rock», operó entre 1934 y 1963, albergando a criminales notorios como Al Capone. Fue cerrada debido a los altos costos de mantenimiento y se transformó en una popular atracción turística. Trump ha expresado su intención de utilizarla para encarcelar a los delincuentes más peligrosos del país, incluyendo inmigrantes indocumentados con antecedentes penales.
La reapertura de Alcatraz forma parte de una estrategia más amplia de Trump para endurecer las políticas de inmigración y justicia penal, incluyendo el envío de inmigrantes con antecedentes criminales a prisiones de alta seguridad como Guantánamo y el Cecot en El Salvador.
Críticos, como la ex presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, han calificado la propuesta como poco seria, señalando que Alcatraz es actualmente un parque nacional y una atracción turística importante.
La viabilidad de reabrir Alcatraz como prisión plantea desafíos logísticos y financieros significativos, dado su estado actual y su estatus como sitio histórico administrado por el Servicio de Parques Nacionales. (I)