Además, confirmó que dos de sus exministros asesoran al gobierno venezolano.
El expresidente ecuatoriano Rafael Correa, quien actualmente reside en Bélgica para evadir una condena de ocho años de prisión en Ecuador, concedió una entrevista al medio español El Español, donde reconoció mantener vínculos laborales con el gobierno de Venezuela liderado por Nicolás Maduro.
Ante la consulta sobre su opinión respecto a Maduro, Correa lo describió como “un ser humano muy bondadoso y pacífico”, y afirmó que, al igual que otros líderes latinoamericanos como Hugo Chávez o José Mujica en sus tiempos de guerrillero, es víctima de una campaña de desprestigio a nivel internacional.
Correa también reveló que dos exfuncionarios de su administración (2007-2017) actualmente trabajan como asesores económicos para el régimen venezolano, detalle que no fue divulgado durante la campaña presidencial de Ecuador en 2025. “No es que yo trabaje directamente para Maduro, sino que somos asesores económicos de Venezuela. Tengo dos exministros de Economía trabajando allá, realizando un trabajo extraordinario”, explicó.
En la entrevista, el expresidente atribuyó a su influencia y a la asesoría brindada una mejora en la economía venezolana, a pesar de que el país sigue enfrentando problemas estructurales como el desempleo formal y la pobreza creciente, que han provocado una migración masiva.
La cercanía de Correa con el régimen de Maduro también tuvo repercusiones políticas en Ecuador. Su influencia dentro del movimiento Revolución Ciudadana fue uno de los factores que explicaron la derrota electoral de Luisa González en las elecciones presidenciales de 2025. Durante un debate previo a la segunda vuelta, González reconoció que, en caso de ganar, reconocería a Maduro como presidente legítimo de Venezuela, una postura que hasta entonces había evitado declarar en público.