Las ofertas de hasta el 80% desataron aglomeraciones y empujones en supermercados y locales de Guayaquil
El Black Friday volvió a desbordar a Guayaquil. Desde las primeras horas de este jueves 27 de noviembre, cientos de personas se congregaron en supermercados y tiendas para asegurar productos con descuentos de hasta 80%, lo que provocó aglomeraciones, empujones y hasta rejas derribadas.
La escena más fuerte se registró en Hipermercados Coral, en la avenida Carlos Julio Arosemena. La fila comenzó a formarse desde las 06:00, y dos horas después la presión de la multitud tumbó una de las rejas del estacionamiento. El ingreso tuvo que adelantarse y la atención inició antes de las 09:00.
Situaciones similares se reportaron en Quito, donde clientes también forzaron rejas metálicas ante la apertura de puertas.
Desespero por entrar y promociones que vuelan
Electrodomésticos, colchones, ropa, artículos de limpieza y productos de despensa fueron los más buscados. Muchos compradores asistieron en grupos para turnarse el lugar en la fila y evitar quedarse fuera.
“Todo sale barato, pero se acaba rápido. Por eso hay que venir temprano”, comentó una compradora que entró entre las primeras. Las promociones 2×1 y los precios reducidos generaron mayor presión en los accesos, obligando a varios locales a reforzar su personal de seguridad.
Fin de semana de alto impacto económico
El Black Friday y el Cyber Monday siguen siendo fechas clave para el comercio ecuatoriano. Este año, el viernes 28 de noviembre y el lunes 1 de diciembre marcarán el pico del consumo.
La Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG) proyecta que noviembre cerrará con ventas superiores a USD 18.600 millones, un crecimiento del 9,5% frente al mismo mes del 2024.
Solo entre el viernes 28 y el lunes 1, el comercio movería entre USD 1.550 y 1.600 millones, casi el 18% del total mensual. Las categorías más demandadas son:
Tecnología
Electrodomésticos
Moda y calzado
Productos para el hogar
Telefonía y computación
Juguetes
Deportes
El crecimiento del comercio electrónico también impulsa la venta de accesorios, muebles y pequeños electrodomésticos.
Con imágenes de rejas cayendo, filas interminables y compradores corriendo para ingresar, el Black Friday vuelve a mostrar su capacidad de mover masas y tensar los sistemas de atención en Guayaquil.
Y el fin de semana recién empieza.








