Aquiles Álvarez denuncia motivaciones políticas en la resolución ministerial.
El conflicto por la construcción del paso a desnivel en Los Ceibos, al norte de Guayaquil, se intensificó la noche del 27 de julio con un pronunciamiento público del alcalde Aquiles Álvarez. A través de un video difundido en su cuenta de X (antes Twitter), el burgomaestre hizo un llamado directo a la prefecta del Guayas, Marcela Aguiñaga, para que no acate la disposición del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAATE), que solicita la revocatoria del registro ambiental del proyecto vial.
“Guayaquil no puede pagar el precio de una obediencia ciega”, advirtió Álvarez, quien sostiene que la resolución ministerial “carece de sustento técnico y legal”. En su intervención de más de cuatro minutos, el alcalde alegó que la orden del MAATE responde a intereses políticos y no a criterios ambientales objetivos.
“El Ministerio del Ambiente quiere que usted revoque un permiso legal sin pruebas, sin inspección, sin estudios técnicos. Eso no solo es arbitrario, es totalmente inconstitucional”, afirmó el alcalde, citando el artículo 11, numeral 3 de la Constitución, que exige que toda decisión estatal se interprete en favor de los derechos ciudadanos.
Álvarez defendió la legalidad del proyecto y reiteró que no existen estudios técnicos ni pruebas científicas que demuestren una afectación al medio ambiente. “No vamos a cortar ni un solo árbol, vamos a sembrar miles, nativos. No se toca un bosque. Es cemento sobre cemento”, recalcó.
El alcalde también cuestionó el procedimiento seguido por el MAATE. “¿Qué motivación presentó el Ministerio del Ambiente? Una simulación en un sistema informático. Ninguna inspección, ningún dron, ningún análisis técnico”, sostuvo.
Dirigiéndose directamente a la prefecta Aguiñaga, Álvarez la exhortó a no obedecer una resolución que —a su juicio— vulnera derechos fundamentales como la movilidad y el desarrollo urbano. “Si usted acata una resolución sin motivación técnica, se vuelve responsable de una afectación injustificada a los derechos de la ciudad. Aquí no se trata solo de un puente, se trata de principios”, enfatizó.
En un tono más político, el alcalde le recordó a Aguiñaga su trayectoria: “Es una oportunidad histórica para usted, Marcela. Todos sabemos que ha sido una mujer de carácter, que no se deja imponer las cosas”.

El pronunciamiento surge luego de que, el 24 de julio, el MAATE solicitara formalmente a la Prefectura del Guayas revocar el permiso ambiental de la obra, que ya había sido suspendida desde el 10 de julio por presuntas irregularidades. Hasta ahora, el proyecto permanece paralizado.
En respuesta, la prefecta Aguiñaga aseguró en redes sociales que actuará con “imparcialidad e independencia”, garantizando el derecho a la defensa del Municipio. “Mi compromiso no está con bandos. Está con Guayaquil”, escribió.
Pese al llamado del alcalde, la obra continúa suspendida y no existe una fecha definida para su posible reactivación. El debate entre legalidad, derechos ciudadanos y protección ambiental mantiene dividido al escenario político local.