Segundo Castillo y su manejo en Barcelona S.C.
Segundo Alejandro Castillo —Sir Second Castle, Mortero de Puro Chocolate, El Tigre— ha sido llamado de muchas maneras al que en un momento se veía como la mejor opción de dirigir al equipo torero, pues cada vez que estaba al mando y no había un técnico, resolvía la gestión y daba alegría a la hinchada. Castillo se unió a Barcelona SC como asistente técnico en 2022, donde trabajó bajo la dirección de varios entrenadores, incluyendo a Fabián Bustos y Ariel Holan. Durante su tiempo como asistente, fue puliendo sus conocimientos y hasta allí, todos felices.
Con la salida de Holan del equipo, Segundo Castillo dirige partidos que dan alegría y para citar unos ejemplos: Goleada 8-1 sobre el Cumbayá, empate en el Clásico del Astillero, Barcelona 2–2 Cerro Porteño (Libertadores), Barcelona 2–1 Estudiantes de La Plata (Sudamericana).
Esos resultados dieron como favorito a Castillo para dirigir Barcelona, bajo la venia de Antonio Álvarez, para ser el director técnico por el año del bicentenario en el equipo, donde una vez más, hablar mucho puede perjudicar a la larga los resultados que son, el primero ganar la LigaPro y el segundo, ganar la Libertadores. Ganarlo todo en el año del bicentenario, pero Álvarez nuevamente por hablar y mantener la esperanza, perjudica al equipo y con esos comentarios al hincha, perjudicaron también a Segundo Castillo.
Arrancó la LigaPro y Barcelona partía como el gran favorito. El equipo jugaba con orden, carácter y un espíritu ganador, con la mira puesta también en la Copa Libertadores, torneo que comenzaron con buen pie. Hasta ese momento, todo era celebración: el equipo respondía, los resultados llegaban y Castillo era elogiado no solo por su dirección técnica, sino también por sus trajes, tan icónicos que incluso aparecieron en la revista de moda más prestigiosa del mundo, VOGUE. La táctica, el juego y el método estaban presentes. Pero como todo lo que sube, en algún punto cae… y en este caso, cayó de oreja.
Aquel ídolo del club que brilló en la mitad de la cancha hoy enfrenta críticas por su incursión en el banquillo, una etapa que dejó más dudas que certezas. Si bien contaba con respaldo emocional por parte de la hinchada, el peso de la banca de un club grande no se mide con afecto, sino con resultados. Cambios de esquema sin justificación, alineaciones experimentales y lecturas tardías de los partidos terminaron por evidenciar su falta de preparación para una responsabilidad tan grande. El equipo no solo dejó de sumar puntos clave, sino que perdió jerarquía e incluso confianza. Perdieron en Libertadores, incluso de local, pero ganando, jugando feo en LigaPro, con un partido menos siendo punteros.
Si bien Castillo estadísticamente ha tenido el mejor inicio en la LigaPro, incluso mejor que en la era Bustos, la manera de conseguir esos puntos era el gran problema para la hinchada y las redes sociales, no tardaron de hacerlo eco.
Aquí es donde la crítica debe ir más allá de los errores técnicos. ¿Realmente Segundo Castillo estaba preparado para dirigir a Barcelona SC? ¿O fue la directiva la que lo expuso innecesariamente, dejándolo solo en la tormenta? La falta de planificación institucional, la poca visión a largo plazo y la improvisación constante son síntomas que Barcelona ha arrastrado en los últimos años.
Castillo, más que un villano, parece un eslabón débil usado por un club sin proyecto claro.
Estoy de acuerdo que Castillo es un buen técnico, pero ponerlo como DT en el año del bicentenario, cuando no hay manejo de equipos previos, fue un daño enorme y terrible que le hicieron a Castillo, y también un poco de ego en creer que esta a la altura del equipo más grande del Ecuador. En lo personal, siempre se empieza de menos a más, y sin explicaciones previos, equipos anteriormente dirigidos, entrar por la puerta grande, pesa y ahora, esta cargando con ese peso.
Segundo Castillo merece el respeto eterno como jugador, pero eso no puede confundirse con un aval automático para liderar desde el banquillo. Su paso como técnico dejó lecciones: el ídolo también debe prepararse, asumir responsabilidades con autocrítica y entender que dirigir a Barcelona exige más que mística y amor al club.
El barcelonismo merece un equipo con rumbo, dirigido por profesionales con experiencia o, al menos, con una idea clara de juego. Y Segundo Castillo, si desea seguir en el mundo técnico, debe construir su camino lejos de la presión inmediata de un gigante como Barcelona. Hoy escuchamos rumores de que sale del equipo y quien asumiría el barco es Ismael Rescalvo, después de que en esta fecha 16, perdieron siendo locales 1-2 frente al Manta y sin presentarse a los colegas, donde su enojo también se volvió falta de respeto hacia la prensa.
Barcelona Sporting Club en su año de bicentenario sacó mas camisas que puntos en la Libertadores, donde la dirigencia utilizó a sus hinchas mas fieles como una billetera, donde también hay muchas cosas que hablar sobre ellos, pero eso, y si Dios quiere, cuando se acabe la temporada 2025, el hincha merece mas respeto, no solo espectáculo y camisas conmemorativas. Pobres socios que tienen que esperar hasta el 2028 para poder elegir a alguien que no vea al equipo como cajero automático, si no uno que subsane deudas y les de la alegría tanto nacional como la obsesión continental.
Hay que esperar los cambios que aun se pueden dar, para que en este año de bicentenario, el hincha barcelonista aun pueda seguir oliendo el aire a caramelo. (O)
Este artículo representa una opinión personal y no refleja la postura oficial de este medio. Se trata de un análisis basado en fuentes y percepciones del autor sobre el contexto actual deportivo.